domingo, 28 de abril de 2013

PUESTOS 10, 9 8




10  ARTESANAS LENGUAJE DE ORIGEN, CULTURA Y TRADICIÓN  




Fruto del trabajo manual de comunidades indígenas, campesinos y de artesanos de las ciudades, las artesanías colombianas son la mejor muestra del talento autóctono, y sus formas se constituyen en accesorios ideales para llevar siempre y para enriquecer el diseño de interiores y la decoración. La artesanía colombiana es la máxima representación del folclor del país y su más bella expresión cultural.
Este sector cuenta con unos 350 mil artesanos, de los cuales aproximadamente 60% procede de zonas rurales y de comunidades indígenas, y 65% son mujeres. Cerca de un millón de colombianos viven de forma directa o indirecta de la artesanía.




COSTA ATLÁNTICA FILIGRANA EN JOYAS Y TEJIDOS

En la GUAJIRA es donde se tejen los chinchorros, las hamacas, mantas y las wireñas (sandalias típicas) de los indígenas wayùu, accesorios infaltables de la cultura guajira. Las tradicionales mochilas arahuacas (tejidas por los indígenas arahuacos habitantes de la sierra nevada) también son originarias de la región y se consiguen desde Santa Marta hasta el departamento del Cesar.






De SANTA CRUZ DE MOMPOX, una población donde el tiempo parece detenerse al ritmo de gaitas y acordeones, lo más maravillosos es su joyería. Cada pieza en una verdadera obra de arte formada de hilos de oro y plata, unidos y soldados con perfección y delicadeza por las manos expertas de sus artesanos. Un trabajo delicado de filigrana que crea accesorios de inigualable belleza. No en vano dan vida a su reconocido mundialmente trabajo manual, calidad que, entre otras muchas valió, para ser declarada Patrimonio Histórico y Cultural de la Humanidad por la UNESCO. También sus mesas y sillas de madera gozan de reconocimiento por su esmerada labor, que convierte cada trabajo en un objeto único.






















De MORROA población ubicada en los Montes de María, departamento de Sucre a tres horas de Cartagena, proviene la elaboración de hamacas que tienen fama de ser las mejores no solo de la región sino del país. Sus artesanías originarias son fabricadas con hilo y fibras textiles obtenidas de las hojas de la planta de la sábila. En SAN JACINTO Bolívar, reconocido por la tradición musical de los gaiteros de San Jacinto, quienes con su ritmo han recorrido el mundo entero, también elaboran hamacas, elemento insignia de esta región junto a las carteras y accesorios que gozan de fama internacional.



GALAPA, a 8km de la capital del Atlántico es el lugar de donde provienen las máscaras de madera que se usan en el Carnaval de Barranquilla y objetos de bejuco.


En SAN ANTERO, un paradisíaco lugar situado en el Golfo de Morrosquillo, por la carretera que conduce a Montería, elaboran artesanías de totumo y calabazo.
El archipiélago de SAN ANDRÉS Y PROVIDENCIA, tiene su propia muestra artesanal elaborada en coco, del que resultan objetos fabulosos, collares, botones y accesorios.





CORDOBA cuna de uno de los principales emblemas del país “el sombrero vueltiao”
originario de Córdoba en la costa atlántica, y elaborado por zenùes, un resguardo indígena en el poblado de Lorica, quienes utilizan la hoja de una palma llamada caña flecha, con la que los expertos artesanos también elaboran accesorios como aretes, pulseras, bolsos y otros tejidos que son verdaderas obras de arte típico. Pero ahí no se queda la producción y creación artesanal del país. Este icono de la cultura nacional demuestra que el oficio de los artesanos y las técnicas autóctonas de las manualidades en Colombia van más allá de la simple presentación, reducción y replica de objetos insólitos, sino que constantemente se depuran y se transforman con una clara vocación estética y utilitaria. Incluso, han sido incorporadas a la moda y al diseño interior de vanguardia por su carácter noble, su excelencia en manufactura y su calidad estética, no solo como piezas étnicas meramente decorativas.


BOYACÁ Y CUNDINAMARCA TIERRA DE RUANAS Y ALFARERÍA

RAQUIRA hace honor a su nombre, pues en lengua chibcha significa “ciudad de las ollas” y precisamente por eso es considerada la capital de la cerámica de Colombia, por  sus trabajos de alfarería tradicional con arcilla, además de
Tejidos y canastos.





IZA es famosa por las ruanas (una manta de lana gruesa, a la manera de los ponchos indígenas, con una abertura en el centro para pasar la cabeza, típica  del altiplano cundiboyacense), al igual que NOBSA, poblado de 8km de Duitama, donde además de ponchos elaboran tejidos de lana, forja y muebles rústicos.


El VALLE DE TENZA, es uno de los centros de cestería y alfarería mas destacados del país. Particularmente sobresale la labor que hacen mujeres y niños en cestería con Chin o caña de castilla, fique, crin de caballo, bambú y hojas de mazorca, para la elaboración de canastas, roperos, baúles, revisteros, papeleras y portalápices, entre otros bellos objetos hechos a mano.


TINJACÀ, muy cerca de Sutamarchan y de Ràquira, por la vía Chiquinquirá, han adoptado la artesanía de tagua, semilla conocida como “el marfil vegetal”, con el que elaboran piezas únicas magistralmente tallados por los artesanos del municipio. La vereda Punta Larga, en Duitama, cuenta con los mejores artesanos de forja y madera de Colombia.


En CUCUNUBÀ (Cundinamarca) hay una larga tradición de tejedoras, que en telares manuales elaboran cobijas, ruanas, chales, bufandas de algodón y lana, ideales para clima río y templado, de suave textura y elegantes diseños, con calidad de exportación; además de guantes y de otros tejidos de junco y henea (fibras vegetales) y de canastos, que normalmente se encuentran en la vía principal de Ubatè Chiquinquirá, Fonquetà, vereda de Chìa, tiene un mercado artesanal con tejidos de lana, piezas hechas de plata, cuadros repujados de cuero y collares multicolores, bordados, tapices, cojines, mochilas, bases para mesas y sillas, tarjeteros y hasta chalecos. En SILVANIA se elaboran figuras de madera, pajareras y mubles de mimbre y guadua. De Apulo provienen preciosas cestas tejidas, que cada año concursan por el premio al mejor artesano en esta especialidad.



















DEL PACÌFICO HASTA LOS LLANOS ORIENTALES DISEÑO DE FIBRAS NATURALES

La palma werregue, la tagua y la madera son los elementos preferidos para la elaboración de accesorios y elementos utilitarios que se fabrican en el departamento de Chocó. También son de buena manufactura las tallas de animales fabricadas de okendo, madera que trabajan magistralmente los indígenas de la zona.


En el otro costado del país en LOS LLANOS ORIENTALES, Acacìas Meta, tiene un trabajo admirable en artesanías tejidas de junco, entre otras fibras naturales propias de la región. Las comunidades indígenas de Vichada ofrecen flechas y arcos de macanilla; mochilas bolsos y cestas hechas con la palma de moriche, figuras talladas en madera; rejos y sillas hachas de cuero de ganado.






LOS ANDES, BORDADOS Y PORCELANAS

De la zona cafetera hacia el Valle del Cauca, CARTAGO es la ciudad famosa por el esmerado trabajo de las bordadoras, que por demás tiene renombre internacional, y TULUÀ se distingue por las artesanías de madera, especialmente por los trompos y baleros.




Los muebles de guadua y los sombreros de paja son oriundos del Triángulo del Café. En AGUADAS Caldas, el dedicado trabajo de los artesanos ha dado como resultado el sombrero aguadeño, una prenda reconocida como icono de la cultura cafetera; de hecho, cada año se celebra un festival para honrar esta actividad


SANDONÀ es reconocida por los tejidos de paja toquilla y de iraca, con los que sus artesanos crean desde sombreros hasta muñecas, que sorprenden por la perfección de sus rasgos.


El carriel (especie de maleta de cuero de varios bolsillos, que se tercia en el pecho) es el accesorio más popular de la región cafetera.
En cuanto a cerámica, el municipio de CARMEN DE VIBORAL Antioquia, se hizo famoso por sus fábricas de loza y sus porcelanas decoradas a mano por artesanos que han sostenido esa tradición desde el siglo XIX. El proceso de amasar la arcilla para convertirla en artículos esmaltados ha sido reproducido en toda la región cafetera.



Por su parte los alfareros de la CHAMBA Tolima confeccionan vajillas, pequeñas esculturas y objetos de cerámica negra, con una técnica aprendida de generacionalmente: pulir y frotar cada pieza con ágatas y cantos rodados.
Hacia el sur del país de las tradiciones indígenas del departamento de Nariño surgió la técnica para extraer la resina del árbol  mopa-mopa, que se calienta para obtener finas láminas, que luego se tiñen con tintes vegetales. Con las laminillas se componen dibujos que se adhieren a la superficie de objetos de madera. Esta técnica milenaria conocida como Barniz de Pasto, se ha conservado hasta nuestros días y se usa para realizar modernos dibujos en bandejas y platos, jarrones, cajas y otros objetos.





Al norte de la Cordillera Oriental, la tradición santandereana reclama el tabaco como un elemento artesanal, autentico de su región


DEL AMAZONAS

La comunidad indígena de los Huitoto asentada en la Chorrera Amazonas, un poblado rodeado por los rápidos del río lagaraparanà, es la creadora de cestería, cerámica, tejidos de fibras vegetales y tallas en madera.





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9 ARQUEOLOGÌA, ANTEPASADOS QUE PERDURAN….

El hallazgo de fascinantes figuras precolombinas en las zonas exploradas del país permite descubrir culturas que dejan huella en su paso por el territorio colombiano. Las piezas de gran valor arqueológico, además de su elaboración en metales preciosos y la singular alfarería, en Colombia son consideradas como verdaderas obras de arte que permiten interpretar que para las culturas prehispánicas el oro era un medio, que en sus manos, les permitía trascender. La leyenda de El Dorado y Ciudad Perdida, en la Sierra Nevada de Santa Marta, revelan los secretos de las tradiciones de comunidades indígenas que valoraron la riqueza absoluta de estas tierras.



CIUDAD PERDIDA, TIERRADENTRO Y SAN AGUSTIN HUELLAS MONUMENTALES

Los Arawak, Caribes y Mocanes habitaron la costa atlántica colombiana y en poblaciones como Tubara, Malambo, Usiacurì, Galapa, Barona y Piojo han dejado rastros de su dedicación a la agricultura, la caza y la pesca que les proporcionaban los ríos, las  ciénagas y el mar. La base de la alimentación era el maíz y el casabe. Sin arar la tierra, cultivaban sistemáticamente algodón, yuca, ají, batata y auyama, y quemaban la tierra. Utilizaban conchas marinas y ejes de caracoles para la fabricación de objetos ornitomorfos y zoomorfos, y para confeccionar joyas.
De otro lado, en la Sierra Nevada Santa Marta se guarda uno de los vestigios más maravillosos del mundo: Ciudad Perdida o Teyuna. Las primeras excavaciones en la zona de la Sierra Nevada tuvieron lugar en las primeras décadas del siglo XX, sin embargo, el descubrimiento de lo que hoy se conoce como ciudad perdida tubo lugar en 1976 a orillas del río Buritaca. Los hallazgos arqueológicos resultan una muestra  de los avances arquitectónicos y de ingeniería de la cultura Tayrona, construidos por una amplia zona de terrazas circulares conectadas entre si por caminos extensos, escaleras y puentes, alternando zonas de cultivo en diferentes climas y alturas. Históricamente, este parque fue cuna de una gran civilización que con la llegada de los conquistadores españoles, en el siglo XVI, se vio obligada a refugiarse en las alturas de la sierra. En la actualidad sus herederos, los Kogui, los Arsarios y los Arhuacos, aún habitan el territorio.




Para llegar a ciudad perdida se toma la vía Santa Marta-Riohacha y se desvía en el sitio conocido como Guacha Puerto Nuevo en el Km. 52, hacia la población del Mamey.







Los hallazgos de San Agustín y Tierradentro son parte de un circuito cerca al nacimiento del río Magdalena, al sur del país, que es vital conocer por su importancia arqueológica.

En El Parque Arqueológico San Agustín, declarado Patrimonio Histórico y Cultural de la Humanidad por la UNESCO, lo ancestral y lo sagrado están presentes en sus estatuas creadas por los indígenas de las culturas precolombinas que habitaron la región. Dentro de las 78 hectáreas de extensión del parque se hallan 130 muestras de los monolitos que representan la cosmovisión de los indígenas frente al mundo y las relaciones que establecían entre la vida, la muerte y la naturaleza. Estas impresionantes piezas están organizadas en tres mesitas, allí encontrara ídolos que cumplían el papel de guardianes, encargados de custodiar las tumbas y velar el paso de los difuntos hacia la muerte. Además de las mesitas, podrá conocer el bosque de las estatuas y la fuente del lavapatas, centro ceremonial descubierto apenas hace 70 años, y que se distingue por las figuras de serpientes, micos y lagartijas tallados en rocas, y por los pequeños canales que transportan el agua hasta tres pozos, donde también se hallan esculturas con imágenes humanas, de animales y algunas de seres míticos.

Sus creencias mágico – religiosas se manifestaban en la escultura de monumentales estatuas talladas según los principios de diseño, abstracción y simbolismo, manejo del volumen y de espacio que cualquier diseñador actual podría envidiarles. La característica principal de las esculturas de San Agustín es una gran cabeza por lo general desproporcionada con relación al resto del cuerpo. 





Las figuras representativas que más llaman la atención son:

• Doble Yo – representación de un guerrero o guardián tallado en piedra al estilo naturista que es un ser dual (doble cuerpo con sus respectivas cabezas integradas en un extremo a la cabeza felina frontal). Su poder simbólico se integra en lo masculino y lo femenino, siendo un símbolo de un poder mágico de un chamán.




• El Partero (llamado por los cristianos El Obispo) – una figura enorme de 4 metros de altura y varias toneladas de peso. Es una figura antropomorfa que recibe a un niño de los pies. Abajo se encuentra la mujer durante el parto. Esta figura es todo un misterio. El Partero mira al oriente por donde sale el sol, representando con esto la vida. Al fondo, se encuentra la tumba, es decir, la muerte.


• Águila con una serpiente en sus garras  símbolo de la creación, relacionado con la jerarquía política y símbolo del poder. Además de las esculturas, el conjunto de San Agustín constituye un centro ritual funerario, demostrando que para la civilización agustiniana la muerte fue un aspecto fundamental. Las tumbas están compuestas por una cadena de lajas de piedras paradas alrededor de un espacio donde se depositaba el cadáver. En los entierros de alta jerarquía se sobreponía sobre las demás lajas una piedra labrada con la representación animal o humana. En estas tumbas de piedra se enterraban los cadáveres con cerámica y diademas, brazaletes, pectorales y figuritas de oro. Encima de las tumbas se encontraban las estatuas. Allí, en la superficie, donde están colocadas actualmente, se encontraron enterradas de pie. La monumentalidad de las estatuas y de las tumbas de piedra refleja hoy en día un sistema complejo de pensamiento de esta cultura desconocida que entendía y explicaba el mundo a su manera, tallando el misterio e inmortalizándolo en las piedras.  














Tierradentro en el departamento del Cauca, a la vez tiene vestigios de las culturas indígenas que habitaron este territorio del sur del país hacia el año 1000 después d.C. en sus asentamientos dejaron las huellas de su paso por estas tierras, evidenciadas en los hipogeos 8sepulcro subterráneo), magnificas construcciones subterráneas con fines funerarios, que fueron cuidadosamente adornadas con dibujos geométricos en rojo, blanco y negro. En este recorrido se encontrara con el río Páez, afluente del Magdalena, y con la amabilidad de la comunidad de los Nasa, quienes están orgullosos de su pasado. Tierradentro es un lugar ancestral situado a 110 Km. de Popayán, con construcciones subterráneas que alcanzan hasta los 9 metros de profundidad, y maravillan a los visitantes por su significado y por la forma como fueron elaboradas.



TRAS LA LEYENDA DEL DORADO

La laguna de Guatavita, ubicada a tan sólo 75 Km. de Bogotá, era un punto sagrado para la cultura Muisca, al ser considerada una puerta que permitía el acceso de unos cuantos mortales al reino de los dioses. Según cuneta la leyenda, la laguna fue formada por un meteoro gigante que cayó en aquel lugar hace 2000 años y los Muiscas interpretaron este fenómeno como la llegada de un Dios dorado que habitaba sus profundidades. El lago era objeto  de adoración con valiosas ofrendas de oro y esmeralda que dieron lugar a la leyenda del dorado.




8 LA FE QUE MUEVE AL TURISMO

Colombia es un país bendecido por la diversidad de recursos naturales, de climas, de geografías, de fauna, de flora, de ríos y de mares. Este milagro de inmenso patrimonio natural y cultural, también tiene santuarios de oración, que reciben a peregrinos de todo el mundo en busca de iglesias y monumentos, donde se veneran imágenes santas. Durante todo el año las reliquias de cultos son visitadas por devotos que afirmas su fe, toman su año sabático, o se consagran a sus retiros espirituales, y en semana santa participan de los actos rituales más emotivos. El turismo religioso comprueba que Colombia es un país hecho como Dios manda.



SEMANA SANTA EN POPAYÀN

Conocida como la ciudad blanca, Popayán ubicada al suroccidente del país, a 135 Km. de Cali y una hora de vuelo desde Bogotá, se distingue por su bellísima arquitectura colonial presente especialmente en el centro histórico, donde se destacan sus iglesias de altos campanarios y redondas cúpulas, que en las noches permite contemplar su venerable iluminación. En los museos se atesoran obras de arte religioso y deslumbrantes custodias que datan del siglo XVIII, como en el Museo Arquidiocesano de Arte Religioso, que posee una invaluable colección de óleos de inspiración religiosa, como grabados, centros, coronas, cruces y custodias elaboradas en oro y adornadas con piedras preciosas. Por su incalculable valor se encuentran en una bóveda y solo se exhiben al público durante Semana Santa, el evento cumbre de la ciudad, cuando el fervor religioso y el respeto por los ritos de esta fecha se viven a plenitud en sus calles e iglesias.
Las procesiones son las mayores expresiones culturales de los payaneses. La misión de llevar los “pasos” o imágenes que sostienen en sus hombros los










cargueros durante los desfiles, es heredada de padres a hijos y es considerado un honor participar de esta labor durante los días santos.
El circuito religioso de Popayán incluye la visita a sus iglesias, como la catedral Basílica Nuestra Señora de la Asunción, situada en enmarco de la plaza del parque Caldas, que se destaca por la enorme Cúpula de 40 m de diámetro. Ha sufrido tres reconstrucciones, como consecuencia de los terremotos que afectaron a la ciudad.


 La iglesia San Agustín es el templo desde donde parte la primera procesión de la Semana Mayor, en su interior se encuentra la imagen de la Dolorosa y el Púlpito es de estilo barroco, cubierto con laminillas de oro y plata repujada.




En la iglesia La Ermita se encuentra una custodia labrada que data de 1788.


En la iglesia de Belén se halla la imagen del santo Ecce Homo, una de las más veneradas por los feligreses, construida en lo alto de una colina, desde donde se aprecia una espectacular panorámica de Popayán.


De la iglesia de Santo Domingo parte la procesión del Viernes Santo.


MOMPOX JOYA DEL ARTE RELIGIOSO

También la Semana Santa es el evento cumbre de Mompox, ciudad cercana a Cartagena. Su celebración es tan famosa y tradicional como la de Popayán.
La iglesia Santa Bárbara es el templo insignia de los momposinos, templo que además de concentrar la celebración de los días santos de la semana mayor, es una de las joyas mas valiosas del arte religioso en Colombia. Esta iglesia fue construida en 1613 cuando el obispo del pueblo era don Fray Luis Ronquillo de Córdoba, el aspecto más importante de la construcción es el uso de los pilares de madera, que reemplazan las arquerías de ladrillo o piedra, como se encuentran en algunas de las iglesias de los pueblos andaluces. El remate de la torre barroca octagonal, formada por una cúpula, está rodeado de cresterias, y en la mitad de la torre emerge un hermoso balcón de barandaje salomónico.
El jueves y viernes Santos se llevan a cabo las procesiones presididas por las imágenes de la virgen y el santo sepulcro. Durante el recorrido se visitan todas las iglesias de la población. Los nazarenos con su particular vestimenta y fervorosos cantos son uno de los símbolos más reconocidos de las procesiones y los encargados de llevar las imágenes sacras.








VALLE DEL CAUCA BASÌLICA DEL SEÑOR DE LOS MIAGROS

Guadalajara de Buga, población del  Valle del Cauca, a una hora de Cali por carretera, es conocida como la ciudad señora y considerada como la capital espiritual de América, por el importante número de templos que alberga. Buga se ha convertido en un centro de peregrinación reconocido mundialmente. La imagen del Señor de los Milagros es visitada durante todo el año por millones de fieles.



La Basílica está consagrada a la imagen del señor de los milagros, un cristo tallado en madera y de 1,70 m de altura. La corona de oro y piedras preciosas que adornan su cabeza y los rayos de plata que la complementan han sido donaciones de los creyentes. Es uno de los templos mas reconocidos de Colombia y el mundo, visitado por cerca de tres millones de fieles anualmente. La construcción de la basílica tardó 19 años y la imagen del milagroso fue trasladada de una humilde ermita a su nuevo santuario en agosto de 1907.



CHIQUINQUIRÀ CAPITAL RELIGIOSA DE COLOMBIA

El fervor se hace presente en una de las ciudades que mayor realce religioso tiene en el país. Su imponente basílica es una muestra de la devoción que se tiene en estas tierras. Cuna del caballo de paso fino colombiano y sede del Santuario Mariano Nacional, uno de sus atractivos turísticos, al igual que la Basílica de Nuestra Señora del Rosario de Chiquinquirá, la iglesia de la Renovación, el museo Mariano y el  Museo de Tradiciones Religiosas. 



NARIÑO SANTURIO DE LAS LAJAS UN MILAGRO ARQUITECTÓNICO

Ipiales, población que se encuentra ubicada a 87 Km. de Pasto y a 7 Km. de la frontera con Ecuador, posee un atractivo de indescriptible belleza; el Santuario de Nuestra Señora de las Lajas, situado a 7km del casco urbano del municipio.
Este santuario atrae a millones de creyentes y de turistas, que no cesan de maravillarse ante esta fastuosa construcción de estilo gótico del siglo XVI, conocida como “el milagro de Dios sobre el abismo”, por haberse erigido sobre el cañón del río Guáitara.






        













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