INTRODUCCIÓN Y PRIMER PUESTO

COLOMBIA, PAÍS DE CONTRASTES Y BENDICIONES

Elegir solo 10 de los productos turísticos de este país donde la oferta es tan amplia no es tarea fácil, y mas si tenemos en cuenta esa megadiversidad que envuelve a Colombia, en ese termino podríamos describir todo pero es mejor entraren detalles y decir que este es un país lleno de colores, olores y sabores, que es un sueño apreciar los verdes de nuestras montañas y bosques, los azules profundos y mágicos de los mares y cielos, la pureza del blanco de las nieves perpetuas, los extraordinarios rojos y naranjas de los atardeceres y los dorados de la arena. Todo esto y mucho mas tenemos aquí donde somos bendecidos día tras día y no solo por esos maravillosos paisajes, sino también por su gente que es amable y hospitalaria dispuesta a brindar siempre una calurosa bienvenida a todo el que quiera conocernos.

Bienvenido a esta dimensión de fantasía donde el tiempo parece detenerse y en donde todo el que nos visita quiere volver o quedarse viviendo en este el país de las infinitas aventuras.

VMV.

1 LUGAR

10 LOS DIEZ LUGARES MÁS ROMÁNTICOS DE COLOMBIA

¿Una luna de miel? ¿Un aniversario? ¿Un fin de semana de ensueño?... un inolvidable viaje romántico en Colombia no se reduce la lista de los diez mejores sitios seleccionados, que apenas es una propuesta para explorara las infinitas posibilidades de cada destino.

1. ISLA DEL PIRATA, ARCHIPIÉLAGO DEL ROSARIO

En las islas del Rosario, parque natural y santuario submarino que enmarca la bahía de Cartagena de Indias, se encuentra esta isla que concentra una energía especial en poco menos de una hectárea, con pequeños y acogedores bohíos de un hotel alejado del bullicio, dotado con todas las comodidades necesarias para un viaje romántico. Unas noches en el ambiente sencillo y calido de las Islas del Rosario complementan el encanto de Cartagena de Indias, a 30millas náuticas de la bella ciudad amurallada. La isla del pirata tiene una piscina natural que se forma sobre los corales, ideal para hacer snorkel o bucear, remar o nadar con el mar azul y las palmeras como entorno, además de la isla Pirata, en las Islas del Rosario también se destaca la laguna encantada en Majagua, el hotel Agua en Barù.

2. CENA ROMÁNTICA DE ALTURA EN MONSERRATE, BOGOTÁ

Muchas son las razones para que este sea el sitio de los enamorados: por observar el cerro tutelar de Bogotá, por  tener la mejor vista de la ciudad en toda su extensión, por estar a 3.150 metros mas cerca de las estrellas y por mantener la tradición de los enamorados de subir a Monserrate para ver el mejor atardecer y tomar onces con chocolate. Lo cierto es que la música de un gran piano de cola, los detalles exquisitos y el sabor de la cocina francesa del tradicional restaurante San Isidro, en Monsarrate, son el complemento perfecto para crear el ambiente de una cena romántica de altura, por  excelencia.

3. PASEO ROMÁNTICO POR LAS MURALLAS DE CARTAGENA DE INDIAS

Es imposible no enamorarse de Cartagena de Indias. En esta ciudad insigne y colorida, imponente y caribeña, el plan más romántico comienza con un paseo por la noble Ciudad Amurallada en un tradicional coche tirado por caballos. Una caminata durante la noche cartagenera descubre sitios que respiran un pasado lleno de aventuras y evoca épocas coloniales que aun conserva intactas. Al son de cumbias, sextetos de gaitas y tamboras, vallenatos y ritmos folclóricos se cantan historias de amor tan maravillosas como cuentos mágicos donde todo se hace realidad.

4. ECOHABS DEL PARQUE TAYRONA

A solo 34 Km. de Santa Marta se encuentra el Parque Natural Tayrona, un oasis de playas escondidas único en el mundo, no solo por su bosque que desciende hasta acantilados con formaciones coralinas, desde la montaña mas alta cera al mar, sino porque desde tiempos remotos es el lugar consagrado al encuentro espiritual por los tayrona, la civilización prehispánica mas desarrollada del Caribe. Es un lugar privado e ideal para parejas que quieren escapar del turismo masivo y además, es la reserva ecológica más hermosa de Colombia. Allí, los ecohabs de cañaveral y arrecifes son una opción de alojamiento en bungalows inspirados en las malocas indígenas, pero dotados de las comodidades de  una suite, con un ambiente aislado y apacible. Las cabañas están ubicadas en la cima de un jardín natural donde los senderos de bosque seco se bifurcan hasta fundirse con amplias playas de arena blanca.

Desde los ecohabs se recorren playas recónditas, que permiten explorar un paraíso de aguas cristalinas y entregarse al sol, sin más huellas en la arena que las propias. Basta con reservar con anticipación la llegada a este exótico destino, para disfrutar de relajación y momentos inolvidables en el spa y el jacuzzi inmersos en este santuario natural, una de las maravillas del mundo aun por descubrir. Como alternativa, el hotel boutique ecoturístico Playa Koralia, ubicado a 48 Km. de Santa Marta, vía la Guajira(a menos de 2 horas del aeropuerto internacional de Barranquilla; y a solo 45 minutos del aeropuerto de Santa Marta), también ofrece le encanto de la zona aledaña al Tayrona y a la Sierra Nevada de Santa Marta en un tesoro aislado.

5. CASA FLOTANTE EN EL AMAZONAS

La casa flotante que se desliza por el río Amazonas es la alternativa mas fascinante para quienes quieren romper la rutina de una manera exótica y disfrutar de nuevas sensaciones, mientras gozan de la privacidad, respiran aire puro en medio del esplendor de la selva tropical mas extensa del mundo y, de paso, viven una experiencia sublime. El barco de dos pisos se alquila hasta para 8 personas y suele levar el ancla desde un recodo del Amazonas entre Leticia y Puerto Nariño, pasando por el Parque Nacional Natural Amacayacu. Su diseño esta inspirado en las construcciones nativas de madera de la región, pero con accesorios y acabados contemporáneos. Dispone de exclusivas suites con cama King size, sofás, hamacas, terraza, tabletas de pizarra en la ducha, ventanales corredizos con vista sobre ese mar de agua dulce que parece no tener fin, en medio de la espesa vegetación, además de GPS, sonar, radar, teléfono satelital y todas las comodidades, incluyendo chef personal. Verde es el agua, verde es el entorno, en este viaje que se disfruta en el ambiente sonoro de una jungla rebosante de vida, con atardeceres de gran impacto y belleza. la privacidad tan solo es interrumpida para recibir la visita de los delfines rosados cuando se cruza el río Amacayacu, afluente del Amazonas.

6. HOTEL DE LA ÓPERA, BOGOTÁ

Con todo el rico legado histórico, artístico y cultural de la Candelaria, en la zona donde se fundo Bogota hace 470 años, el Hotel de la Ópera tiene todos los ingredientes para ser u n lugar ideal en un encuentro romántico: este hotel boutique mas que un museo de la arquitectura colonial y republicana parece un chateau por su atmosfera rebosante de autenticidad que casa perfectamente con las mas románticas imágenes palaciegas. Cuenta con, sala de tratamientos con pétalos de rosas, masajes, baños de luna, además de suites de decoración ecléctica, con mubles de época y comodidades contemporáneas, un buen restaurante y una cava bien seleccionada, ideal para una escapada romántica de relajación y sosiego.

 

7. PLAZA MAYOR DE VILLA DE LEYVA, BOYACÁ

Boyacá departamento de mil contrastes, tiene una de las poblaciones mas lindas y de mayor valor histórico de Suramérica: Villa de Leyva. Este pueblo de gente amable, a tres horas de Bogota, conserva intactas, alrededor de la plaza mayor, sus casa blancas de estilo colonial. Su carácter señorial invita a caminar por calles empedradas ambientadas por faroles de luz tenue que propician momentos íntimos y sirven de inspiración para nuevos romances. Este es uno de esos sitios maravillosos que lo tienen todo, donde se siente que el tiempo se detiene y que en sus bares, cafés, hostales, museos y reservas naturales de las afueras, siempre hay un rincón especialmente acogedor para alejarse de los tumultos.

8. LAGUNA DE GUATAVITA

Una laguna en una montaña y una leyenda que sigue deslumbrando en el altiplano que rodea a Bogota es suficiente inspiración para seguir los pasos de los Muiscas, los antiguos pobladores de las tierras Andinas colombianas. La leyenda del dorado cuenta que los caciques indígenas se cubrían de oro para ofrendar a los dioses piedras preciosas y esmeraldas en el corazón de una laguna brillante y verde como sus tesoros. En una caminata de 20 minutos por sus senderos que conservan la mística de la leyenda se llega a Guatavita, un espejo de agua que refleja el sol y con el atardecer va cambiando de aguamarina a esmeralda. Esta es la nota de color que aun persiste de la mas grande leyenda revelada por los nativos que no solo contaban historias de tesoros sino de una ciudad de oro, un rito y un centro ceremonial que dio lugar a la fiebre de de oro de los conquistadores españoles del siglo XVI. El misticismo de la laguna inspira y llena de energía a cada visitante de este lugar considerado por los Muiscas como el ombligo del mundo y como una “puerta” que permite el acceso a unos cuantos mortales privilegiados a otro mundo. También se consideraba que permitía que entraran y salieran dioses de ella. Dando origen a su leyenda.

9. BAHÍA SOLANO. CHOCÓ

Con selva al lado del mar, la costa colombiana del pacífico es un santuario de aves y vida que se conjuga con atardeceres singulares. En las noches despejadas de luna llena, cuando la marea baja y el eco de las olas oculta el vibrante palpitar la vida acuática, el firmamento se refleja en las playas de arena lisa, en una alucinante sensación de caminar sobre las estrellas, que inspira todos los sentidos.

Desde Bahía Solano se aprecian las acrobacias de las ballenas jorobadas que cada año surca el océano pacifico como escenario de un espectáculo nacional que ha perdurado por miles de años. De julio a octubre, durante la temporada de apareamiento, cerca de las ensenadas de la costa pacifica colombiana, las ballenas jorobadas animan con sus cantos sus rituales de amor, rodeadas de la exuberante naturaleza del bosque tropical.

10. LA CARROZA DE DON RÓMULO EN LA CANDELARIA

Don Rómulo pasea a los enamorados por la Candelaria a bordo de su carroza, que rompe los silencios coloniales con el golpe de los cascos de su caballo en el piso de sus calles empedradas. En la noche soplan vientos fríos desde los cerros orientales, generando la oportunidad perfecta para tomar una copa de vino caliente en algún café de las calles históricas de Bogotá.